Preguntas
frecuentes

Esterilidad es la incapacidad de una pareja para concebir tras un año de relaciones sexuales regulares sin protección, mientras que infertilidad se refiere a la incapacidad de llevar un embarazo a término, incluyendo problemas para quedar embarazada y para mantener el embarazo.

Sí, estudios indican una disminución de la fertilidad a nivel mundial debido a factores como cambios en el estilo de vida, edad avanzada al intentar concebir, problemas de salud, y exposición a contaminantes ambientales.

Puede estar relacionado con problemas de infertilidad, pero esta es solo una de las múltiples causas. Los problemas de infertilidad afectan a una proporción significativa de la población y pueden influir en las tasas de natalidad. Sin embargo, otros factores también juegan un papel crucial en el descenso de la natalidad, como cambios en las preferencias personales y sociales, el aumento en la edad en que las personas deciden tener hijos, factores económicos, el acceso a métodos anticonceptivos, y la educación sobre planificación familiar.

Los días de ovulación son aproximadamente en la mitad del ciclo menstrual, usualmente entre los días 12 y 16 para un ciclo de 28 días.

Tener relaciones sexuales cada 2 o 3 días durante el periodo fértil mejora las posibilidades de embarazo. Esta frecuencia asegura la presencia de espermatozoides viables cuando ocurre la ovulación, sin necesidad de identificar el momento exacto de ovulación, reduciendo el estrés y aumentando las oportunidades de concepción.

Una clínica de Reproducción Asistida es un centro especializado donde se ofrecen tratamientos para ayudar a personas con dificultades para concebir. Utiliza tecnologías avanzadas como la fertilización in vitro (FIV) y la inseminación artificial (IA) para aumentar las posibilidades de embarazo, abordando problemas de infertilidad tanto masculinos como femeninos.

Las mujeres pueden concebir naturalmente hasta la menopausia, generalmente hasta los 40-50 años, aunque el riesgo de complicaciones aumenta con la edad. Los hombres pueden tener hijos a edades más avanzadas, incluso más allá de los 70, pero la calidad del esperma disminuye, afectando la fertilidad y la salud del bebé.

La infertilidad primaria se refiere a parejas que no han logrado concebir tras un año de relaciones sexuales regulares sin protección. La infertilidad secundaria describe a quienes, después de tener uno o más hijos, no pueden concebir nuevamente o llevar otro embarazo a término bajo las mismas condiciones.

Se recomienda acudir a un especialista en fertilidad si no se ha logrado un embarazo después de un año de intentarlo regularmente sin protección en mujeres menores de 35 años, o después de seis meses en mujeres mayores de 35. También se aconseja si hay antecedentes de problemas de fertilidad.

El estudio básico de fertilidad de la pareja incluye análisis de semen para evaluar la salud del esperma, pruebas de ovulación y reserva ovárica para la mujer, y una histerosalpingografía para examinar la salud de las trompas de Falopio y el útero. Este enfoque diagnóstico inicial identifica posibles problemas de fertilidad.

Sí, algunas enfermedades hereditarias pueden afectar la fertilidad tanto en hombres como en mujeres, interfiriendo con la producción de gametos, su calidad o la capacidad de llevar un embarazo a término. Esto incluye trastornos genéticos específicos que impactan directamente en la función reproductiva o en la salud reproductiva general.

Los abortos espontáneos suelen ser causados por anomalías cromosómicas en el feto, problemas hormonales, trastornos del útero o cuello uterino, infecciones, y enfermedades crónicas en la madre. Factores como la edad avanzada, el estilo de vida y condiciones médicas preexistentes también pueden incrementar el riesgo de aborto espontáneo.

La esterilidad de origen desconocido se refiere a casos en los que una pareja no logra concebir después de un año de intentos, sin que las pruebas diagnósticas tradicionales identifiquen una causa clara. Implica que tanto las evaluaciones de fertilidad masculina como femenina no muestran anomalías que expliquen la dificultad para concebir.

Para determinar si la calidad espermática es buena, se realiza un seminograma o análisis de semen, que evalúa la concentración, movilidad, y morfología de los espermatozoides. Valores dentro de rangos establecidos por la OMS indican una calidad espermática adecuada, crucial para la fertilidad masculina y las posibilidades de concepción.

Sí, el sobrepeso puede afectar negativamente la calidad del semen, reduciendo la concentración, movilidad y morfología de los espermatozoides. Esto se debe a desequilibrios hormonales y aumento de la temperatura escrotal asociados al exceso de grasa corporal, lo que puede disminuir significativamente la fertilidad masculina.

En un espermatograma se mide la concentración, movilidad y morfología de los espermatozoides. También evalúa el volumen seminal, el pH, la licuefacción y la presencia de células blancas o aglutinaciones. Este análisis proporciona información esencial sobre la salud reproductiva masculina y la capacidad de fertilizar un óvulo.

Un espermatozoide sano se define por su capacidad de fertilizar un óvulo, lo cual depende de su concentración adecuada, movilidad efectiva y morfología normal. Estos factores aseguran que el espermatozoide pueda viajar a través del tracto reproductivo femenino y penetrar el óvulo, iniciando la fecundación.

La azoospermia es una condición en la que no hay espermatozoides presentes en el semen. Esto puede deberse a un bloqueo en las vías espermáticas (azoospermia obstructiva) o a problemas con la producción de espermatozoides (azoospermia no obstructiva). Es una causa significativa de infertilidad masculina que requiere evaluación y tratamiento específicos.

Sí, con la fertilización in vitro (FIV) se puede lograr el embarazo incluso si tienes las trompas de Falopio ligadas. La FIV implica extraer óvulos directamente de los ovarios, fertilizarlos en el laboratorio con espermatozoides, y luego implantar el embrión resultante en el útero, obviando así las trompas de Falopio.